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MANUAL DEL TALENTO DEL SERVICIO DOMÉSTICO

1. NORMAS DE CONDUCTA

La convivencia requiere en la mayoría de las ocasiones, respetar una serie de normas de conducta social, imprescindibles para mantener la convivencia. En el tema de las empleadas de hogar, lógicamente, también deberían aplicarse con el fin de crear un ambiente dentro del hogar satisfactorio y agradable para todas las personas que lo integran.

• Con respecto a la forma de dirigirse a las personas adultas, salvo que de mutuo acuerdo se decida, siempre será de usted/es (a los menores se suponen que esa regla no puede aplicarse) y en el caso de tener que consultar alguna duda o pedir algo, se hará “por favor” y “gracias”.
• En los temas personales de la familia la empleada no deberá inmiscuirse nunca (tanto en sus conversaciones, educación de los niños) y tampoco deberá hacerlo cuando otras personas ajenas (familiares, vecinos) se encuentren en ese momento en el domicilio.
• El uso de los objetos integrantes de la vivienda siempre se hará con autorización del empleador ( teléfono, tomar un café a media mañana, etc.) y cuando se autorice a coger el teléfono, deberá pasarse mediante nota escrita quien ha llamado tratando siempre a esa persona con la mayor de las cortesías (desconoce quien está al otro lado del aparato).
• Finalmente decir que la imagen e higiene de la empleada de hogar deberá respetar las mínimas normas sociales exigidas para cualquier ciudadano en un trabajo (aseo, vestimenta, etc.)

2. LA LIMPIEZA DEL HOGAR

La limpieza del hogar suele obedecer a una serie de normas impuestas por el/la empleador/a que es quien decide como deben hacerse las cosas en su casa. No obstante, puede darse el caso que no le instruya ninguna orden o que en algunos supuestos no le haya aconsejado como debe hacerlo, por lo que anotaremos una serie de principios básicos que se suelen aplicar en la realidad por la mayoría de los hogares.

Los útiles de trabajo lógicamente deben estar limpios y desinfectados: evitar que la fregona se encuentre muy desgastada en cuyo caso debe reemplazarse por otro recambio, las escobas deben estar libres de pelusas y las bayetas desinfectadas y lavadas, evitando juntar las de la cocina con las del baño.

Antes de comenzar la limpieza es conveniente ventilar todas salas durante 10 o 15 minutos (mucho mas no por ser innecesario y acarrear problemas adicionales de polvo, frió o calor).

Dormitorios: hay que hacer las camas con la ropa bien estirada. Suelen componerse de sábana bajera, sábana de arriba, mantas y colcha o edredón y finalmente la almohada. La sábana de arriba se suele doblar sobre la manta y previamente es conveniente airear todos los componentes unos minutos. Posteriormente se recogerá la ropa sucia para llevarla al canasto, la limpia se guardará en los armarios junto con los zapatos y se intentará ordenar un poco el resto de los objetos (libros, juguetes, etc.). Finalmente se limpiará el polvo, se barrerá o pasará el aspirador y se fregará o pasará la mopa (parquet).

Cuartos de baño: hay que limpiar el lavabo, bidet y bañera con los productos que indiquen, aclarando al final. Las mamparas y espejos deberán quedar sin rastros de agua o producto.
Con respecto a la grifería especial cuidado con los productos que se emplean (igualmente con cualquier otro objeto como toalleros, jaboneras, adornos, etc.). El retrete es conveniente utilizar desinfectantes olorosos dejando siempre la tapa cerrada y el papel higiénico colocado Finalmente barrer y fregar el suelo con fregona bien escurrida.

El salón: es una de las salas mas importantes, deberá atenderse a las instrucciones que nos faciliten, aunque siempre será imprescindible limpiar el polvo de los muebles, cuadros, adornos, espejos, sillones, etc barriendo (o aspirador) y fregando (o mopa) al final.

La cocina: por su complejidad requiere en ocasiones limpiezas puntuales exclusivas desalojando los armarios por dentro. Siempre hay que limpiar las encimeras (echando al cubo de basuras los restos), armarios y electrodomésticos. Con respecto a los fogones, el horno y la mampara extractora, se suelen utilizar quitagrasas (cuidado con su uso) aunque siempre hay que seguir las instrucciones que nos den (bien se trate de cocinas de gas, vitro cerámica, inducción, etc.). Finalmente se limpiará el alicatado sin dejar huellas y los electrodomésticos por fuera (por dentro solo si así lo piden).

Las zonas comunes: se limpiaran igualmente (barrer y fregar o mopa), como el hall, escaleras (chalets), pasillos, porches, etc. y por supuesto siempre los cristales de las ventanas/ales han quedar en perfecto estado (así como persianas y alféizares)

El resto de los elementos: puertas (huellas en pomos), televisiones, muebles, radiadores, lámparas, cuadros, objetos decorativos, etc. deberán quedar regularmente limpios de polvo y suciedad.

3. COLADA Y PLANCHA

• El funcionamiento de la lavadora es lo primero que hay que entender y sobre todo las explicaciones que nos faciliten sobre la colada:
– Temperatura del agua.
– Que ropa debe considerarse blanca y cual de color (evitando juntar colores distintos que puedan desteñir)
– Tipo de ropa y centrifugado (lana, algodón, lino, etc.) ya que determinadas prendas puede que tengan que ser lavadas a mano.
– Extraer objetos de los bolsillos de las prendas y lavar ciertas manchas resistentes a mano cuando la lavadora no vaya a poder con ellas.

El uso de los tendederos también es conveniente sobre todo para facilitar el posterior planchado. Así, las prendas deben estar los mas estiradas posibles, tendiendo las camisas con las mangas hacia abajo. El resto se tenderá por las costuras o cintura (caso de pantalones o faldas) prestando especial cuidado en el uso de las pinzas para no marcarlas en exceso. No se podrá juntar la ropa blanca con la de colores (ni entre ellos tampoco) para evitar desteñidos y la ropa delicada que no admite centrifugado (lana, etc.) se colocará directamente encima de las cuerdas. Las prendas pequeñas (ropa interior, calcetines, etc.) se tenderán por separado siempre.

El planchado es en ocasiones un trabajo complicado por lo que es conveniente tener en cuenta ciertas reglas que facilitarán el mismo:
La temperatura de la plancha es importante en función de los tejidos: la plancha caliente se utilizará para lana y algodón y templada para seda, acrílicos y poliéster
Se facilita el planchado con la ropa ligeramente húmeda (en caso de persistencia se puede rociar con algo de agua o vapor) y utilizando un paño de algodón un poco húmedo si se quiere evitar que aparezca brillo en ciertas prendas.
– Los pantalones y faldas se suelen planchar con un trapo húmedo, las camisas se comienzan por los puños y mangas y los polos/jerséis de forma suave para no quitar la forma de los mismos.
– Con respecto a la raya, depende de cada persona (camisas, pantalones, etc.) pero nunca deben hacerse rayas dobles.

4. LA COCINA Y LA MESA
La mesa debe ponerse de forma respetando una serie de principio básicos y sencillos:
Los cubiertos se ponen de fuera hacia dentro los que antes utilicemos (si el primero es de cuchara se pondrá mas a la derecha que el cuchillo que viene después). El tenedor siempre a la izquierda y el cuchillo a la derecha (aunque los dos platos sean de tenedor) y los cubiertos de póster detrás del plato y antes de las copas (el mango del cuchillo y cuchara igual a la derecha y el del tenedor a la izquierda).
Los vasos se pondrán en el siguiente orden de izquierda a derecha: agua, tinto y blanco poniendo una copa para cada tipo de bebida.
Servilletas a la izquierda o sobre el plato y pan a la izquierda encima del tenedor.

Para servir la comida siempre por la izquierda y se retiran los platos por la derecha del comensal, comenzando por las mujeres y de izquierda a derecha de la mesa. Los platos se cambian cuando hayan terminado todos los comensales, la bebida nunca servirla hasta el borde de la copa y el postre se servirá cuando la mesa haya quedado libre de platos, cubiertos, etc. La bebida se sirve en función de los platos (vino blanco, tinto, etc.) salvo el agua que se puede echar desde el principio, siempre por la derecha y su apoyar la botella sobre la copa.

La cocina española es uno de los requisitos más demandados en el servicio doméstico, por lo que es conveniente conocer ciertas recetas de cocina básicas así como algunos conceptos útiles:
Adobar: preparar en crudo carnes y pescados dejándolos cubiertos en aceite, sal, ajos limón o vinagre, cebollas, zanahorias, perejil y especias.
Al ajillo: salsa a base de ajos, guindilla y aceite. Se emplea para condimentar distintos alimentos como gambas, pollo, etc.
Al vapor: cocer en vapor con o sin la aplicación de presión.
Al dente: punto de cocción de la pasta, arroz o verduras que deben estar tiernos pero conservando cierta consistencia.
Aliñar: condimentar con aceite de oliva, sal y vinagre o limón.
Amasar: trabajar la masa estirándola y revolviéndola, doblándola y redoblándola sobre sí misma.
Asar en la olla: cocer un pedazo de carne en cazuela a fuego lento.
Baño maría: consiste en poner el alimento a cocer en un recipiente que se introduce en otro más grande con agua caliente sin dejar que ésta llegue a hervir.
Cocer: hervir un alimento en agua o caldo.
Desengrasar: retirar la capa de aceite y grasa que queda encima de una salsa o guiso con la ayuda de una cuchara.
Empanar: envolver un alimento con pan rallado y huevo antes de freír.
Gratinar: tostar en el horno la parte superior de un alimento preparado, cubierto previamente con pan rallado o queso rallado y mantequilla.